Agentes Federales No Ingresarán a Escuelas Ni Iglesias, Aclara Congresista Cuéllar
El congresista Henry Cuéllar de Texas ha salido al paso de las crecientes preocupaciones dentro de la comunidad sobre la presencia de agentes federales en escuelas e iglesias, asegurando que no ingresarán a estos lugares, salvo que haya una actividad criminal que lo justifique. Esta afirmación, hecha en medio de la creciente incertidumbre en torno a las políticas migratorias del gobierno federal, busca brindar tranquilidad a las familias y a las instituciones locales.
Incertidumbre Sobre Posibles Redadas Federales
A pesar de las afirmaciones del congresista Cuéllar, persiste la preocupación entre algunos sectores de la comunidad acerca de la posibilidad de redadas federales en las escuelas.
Cuéllar enfatizó que las operaciones de las autoridades no se enfocan en los entornos educativos ni religiosos, sino en combatir actividades criminales.
El Departamento de Policía de Laredo También Da Claridad
A la par de las declaraciones del congresista, el Departamento de Policía de Laredo también salió a aclarar su rol en el tema de la inmigración. El jefe adjunto Ricardo González explicó que la misión de la policía local sigue siendo la misma: “No cambia lo que estamos haciendo. Estamos estableciendo con el Departamento de Policía por décadas. Siempre hemos colaborado con nuestros jefes de otras agencias federales, estatales, locales y en sus misiones, aunque el tema de inmigración no es parte de nuestra misión principal.”
Una de las aclaraciones más importantes fue que la policía local no interrogará a las víctimas de delitos sobre su estatus migratorio. Esto es un esfuerzo por asegurar que las personas se sientan seguras al denunciar crímenes, independientemente de su situación legal en el país.
Patrulla Fronteriza Enfocada en la Seguridad Fronteriza
La Patrulla Fronteriza, por su parte, también dejó claro que su misión principal no es intervenir en las escuelas, sino garantizar la seguridad en la frontera. El papel de esta agencia es proteger la línea fronteriza y prevenir actividades ilegales, pero sin comprometer las instituciones educativas o religiosas.





